EL MUNDO
Comienza en medio de gran crisis gobierno Ecuador: paritario y sin vicepresidenta
"Hay violencia cuando abusando del poder te minimizan y te envían a morir a la guerra", critica Verónica Abad
Doce ministras, doce ministros y una vicepresidenta desaparecida en combate político. La primera foto oficial del gobierno de Daniel Noboa no decepcionó a casi nadie, con dosis parecidas de esperanza y polémica: paridad, juventud y diversidad por un lado y la ausencia de la vicepresidenta, Verónica Abad, por el otro.
El mandatario, con su banda al pecho, se rodeó de sus ministros para año y medio de política exprés bajo el asedio del narcotráfico y de la crisis económica. Tan reducido es el tiempo que el dirigente moderado ha decidido cortar por lo sano en la primera crisis de magnitud desatada en Palacio. Abad, desterrada políticamente, ni siquiera acudió a Carondelet para la foto histórica.
En el reparto de espacios, con tarjetas pegadas al suelo donde cada uno debía situarse, no había espacio para la "colaboradora para la paz" en el conflicto en Israel, mermada en sus funciones tras la reestructura de la vicepresidencia y "enviada a Tel-Aviv".
Abad aprovechó un día antes la celebración del día para erradicar la violencia contra la mujer para defenderse a través de un vídeo melodramático que subió a sus redes sociales: "Hay violencia cuando abusando del poder te minimizan y te envían a morir a la guerra. Podrán alejarnos pero el eco de nuestra voz nos liberará".
Empresaria, activista social y ex candidata a la alcaldía de Cuenca, Abad desembarcó en la candidatura de Noboa tras forzar el Consejo Nacional Electoral (CNE) la paridad en el ticket presidencial, así como para conseguir el equilibrio costa-sierra indispensable en la política ecuatoriana. Desde el primer minuto evidenció una agenda propia que barruntaba problemas en el futuro, aunque no de esta magnitud. La crisis se agravó cuando Abad forzó dos encuentros políticos, el primero con Santiago Abascal, líder de VOX, y el segundo con el presidente salvadoreño Nayib Bukele durante la celebración del Miss Universo. Noboa, que se dice "socialdemócrata moderado", ha apostado por una política de centro alejada de los polos radicales y populistas que dominan hoy la política en América Latina.
Dos gotas que desbordaron el vaso y que llevaron al triunfador de las elecciones a deslizar en un discurso, a pocos metros de su vicepresidenta, que "el camino hacia la cima también tiene traiciones, muchas veces de gente que uno ni siquiera espera, gente que uno escoge. Pero así es la vida, así es la naturaleza humana".
Para enrevesar aún más la situación, Ariana Tanca escribió un tuit demoledor horas antes de pasar de ser politóloga a ministra de la Mujer y Derechos Humanos como respuesta al vídeo de la vicepresidenta: "Mambrú se fue a la guerra", disparó con sorna.
"¿Mantenerla en su cargo con una agenda propia, fuera de cualquier estrategia y dejándola generar incendios que después la presidencia está obligada a apagar?", se cuestionó el analista político Pedro Donoso para dar la razón al presidente.
No es la primera vez, ni mucho menos, que presidente y vice la emprenden a golpes políticos. Lenín Moreno, por ejemplo, señaló también desde muy pronto a Jorge Glas, manchado por la corrupción revolucionaria, quien finalmente acabó en la cárcel.
La polémica generada por Abad eclipsó el alcance político de quienes acompañarán a Noboa en semejante tesitura nacional, que según el presidente "han tomado la responsabilidad de darle la vuelta a un país que está gravemente herido. Asumen la responsabilidad de arriesgar sus vidas".
La gran apuesta política del primer gabinete, mayoritariamente conformado por mujeres y jóvenes, es la abogada y profesora universitaria Mónica Palencia, a quien concedió la nacionalidad ecuatoriana esta semana tras 40 años en el país, para que asumiera el Ministerio de Gobierno (algo parecido a un primer ministro), con el encargo además de la cartera de Interior. "La mentalidad delincuencial se ha apoderado de muchos, tanto en el sector público como en el sector privado y hacia eso vamos a trabajar también", adelantó la flamante ministra en cuanto al crimen organizado que aterroriza su país.
La gobernabilidad, casi imposible durante los 300 días del mandato del conservador Guillermo Lasso por sus propios errores y por el acoso de la oposición legislativa, y la inseguridad son los dos retos enormes que asume Palencia, conocida por su templanza.
El otro superministro es Juan Carlos Vega, encargado de rehabilitar una economía acechada por el default. Esta cartera ha estado en entredicho durante semanas, después de que Noboa se viera obligado a desistir de nombrar a su primera candidata, la joven economista Sariha Moya, de 35 años, formada en la madrileña Universidad Carlos III. En sus reuniones en Washington con entes como el Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional en busca de un préstamo de 10.000 millones de dólares, estos dejaron ver que preferían más experiencia para el puesto.
Moya sí estará al frente de la Secretaría Nacional de Planificación al frente de un nutrido grupo de mujeres jóvenes y altamente cualificadas. Sade Fritschi, de sólo 26 años y natural de las Islas Galápagos, es la titular del Ministerio de Medio Ambiente. La Greta Thunberg ecuatoriana tuvo incluso un proyecto para proteger elefantes en Zimbabue.
UN TIKTOKER PARA EL MINISTERIO DE DEFENSA
En un país donde TikTok ha resultado trascendental en las dos últimas elecciones, no podía faltar un tiktoker como Giancarlo Loffredo, nuevo ministro de Defensa, conocido por sus tutoriales de defensa propia y con escuela propia de kárate. El influencer se ha convertido en la sorpresa mayúscula del nuevo gabinete, al estar alejado del perfil por el que apostaba el círculo más próximo a Noboa para luchar contra la "guerra interna": conocedor a fondo de las Fuerzas Armadas y de la Policía, además de experto en Inteligencia, estrategia y tácticas militares. Prudente en sus primeras manifestaciones, Loffredo adelantó que vienen decretos urgentes en seguridad.