EL MUNDO
Detenciones de ciudadanos latinos en redadas migratorias desatan críticas por perfil racial en Los Ángeles

El Correo. Las redadas migratorias encabezadas por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) en Los Ángeles han provocado una fuerte ola de críticas tras la detención de ciudadanos estadounidenses de origen latino, entre ellos una mujer embarazada que dio a luz poco después del arresto.
Activistas denuncian que tras catorce días de operativos ininterrumpidos, ICE ha detenido a cientos de personas, incluyendo latinos nacidos en Estados Unidos. Las organizaciones apuntan a un presunto uso del perfil racial como criterio de detención. “Esto es un caos. Los ciudadanos estadounidenses están siendo detenidos y desaparecidos por su color de piel”, denunció Angélica Salas, directora de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes (CHIRLA).
Una de las historias más alarmantes es la de Cary López Alvarado, una joven embarazada de nueve meses detenida el pasado 8 de junio en Hawthorne, junto a su pareja Brayan Nájera y su primo Alberto Sandoval, ambos ciudadanos estadounidenses. López relató que, pese a afirmar su nacionalidad, los agentes asumieron que era indocumentada y la encadenaron de pies y manos.
“Me preguntaron: ‘¿Pero eres de México, verdad?’, y respondí: ‘No, soy de aquí’”, narró a la cadena KTLA. La presión de las cadenas le provocó dolores que la obligaron a ser hospitalizada. Cuatro días después, dio a luz a una niña sana, que aún no ha conocido a su padre, ya que Nájera fue trasladado a un centro de detención migratorio en Texas.
El abogado Luis Carrillo, representante legal de López, calificó la situación de “indignante y desgarradora”, y advirtió que el estrés causado por el arresto pudo haber terminado en una tragedia.
El caso ha puesto sobre la mesa los riesgos del uso desproporcionado de la fuerza y la discriminación basada en el origen étnico, así como las consecuencias humanas de las políticas migratorias actuales.