El Negocio Oscuro en contra de Los Veganos
Por el Lic. Leonardo A. Tavarez Valerio.
El Correo.-La reciente renuncia de Kelvin Cruz a la Alcaldía de La Vega ha generado un intenso debate y controversia dentro del Partido Revolucionario Moderno (PRM), particularmente en esa demarcación.
Dirigentes locales del partido han expresado su descontento y preocupación por lo que consideran una maniobra política cuestionable, señalando que Cruz, tras abandonar la alcaldía, ha quedado al frente de dos cargos importantes, incluyendo su reciente designación como Ministro de Deportes por el presidente Luis Abinader.
Lo que muchos no dicen es que, esa práctica es vieja, es decir ña renuncia de funcionarios elegidos por el pueblo en el ámbito municipal o congresual, para ocupar otro cargo o por alguna enfermedad. Pero resulta que esos acontecimientos nunca suceden si no están previamente calculados y consensuados.
En el caso de La Vega, que no quepa dudas a nadie, que antes de la renuncia de Cruz, primero se acordó con la Vicealcaldesa para que presente su renuncia al cargo y de esa forma dejar libre el camino para que el alcalde señale de dedo a quien mejor le represente sus intereses.
Cruz, quien había sido un alcalde popular y efectivo, sorprendió a muchos al anunciar su renuncia a la alcaldía por el decreto que lo nombra Ministro de Deportes, un nombramiento que ha sido visto por algunos sectores del PRM como un movimiento calculado para ampliar su influencia política y administrativa, sobretodo porque podrá manejar dos importantes instituciones públicas que manejan recursos y una amplia nómina, ahora a nivel nacional.
Sin embargo, la situación ha desencadenado críticas severas por parte de varios dirigentes del PRM en La Vega y otras áreas del país. Estos dirigentes denuncian que Cruz no solo ha asegurado su posición en el gobierno central, sino que además pretende colocar a un supuesto testaferro suyo en la alcaldía, lo que consideran un intento de mantener el control indirecto sobre el municipio mientras ejerce sus funciones como ministro.
Los críticos argumentan que esta estrategia compromete la transparencia y la democracia interna del PRM, y que la designación de un supuesto testaferro en la alcaldía pone en riesgo la continuidad de los proyectos y el bienestar de los ciudadanos de La Vega.
La preocupación principal radica en que esta persona, al no tener un mandato propio ni el respaldo popular que Cruz tenía, podría no tener la autonomía necesaria para gobernar de manera efectiva y velar por los intereses de la comunidad.
El descontento se ha hecho sentir no solo en La Vega, sino también en otros sectores del PRM a nivel nacional, donde algunos miembros del partido consideran que este tipo de maniobras debilitan la confianza en el liderazgo del partido y crean divisiones internas. Un ejemplo es la pugna por la designación del sustituto, entre los sectores que responden a Eduardo-Yazo-Sanz Lovatón, David Collado e Hipólito Mejía.
Por otro lado, los defensores de Kelvin Cruz argumentan que su experiencia y logros como alcalde lo hacen un candidato idóneo para asumir un rol más amplio y de mayor impacto, como es el Ministerio de Deportes. Señalan que su renuncia a la alcaldía responde a una estrategia para maximizar su potencial y servir al país desde un puesto de mayor responsabilidad, sin que esto implique una desatención a los asuntos locales de La Vega.
A pesar de estas justificaciones, la polémica continúa, y muchos en La Vega esperan ver cómo se desarrollarán los acontecimientos en los próximos meses. La efectividad del nuevo alcalde y el desempeño de Cruz como Ministro de Deportes serán clave para determinar si las preocupaciones de los dirigentes del PRM eran fundadas o si, por el contrario, el movimiento resultará beneficioso tanto para La Vega como para el país en general.
El autor es Abogado y Consultor