EL CIBAO
En el mercado de Santiago hay limpieza, seguridad y se vive en orden.



Por décadas, el estado de franco deterioro, la falta de higiene, la inseguridad y el desorden fueron sinónimos del mercado público de Santiago, mejor conocido como Hospedaje Yaque.
No fue hasta la llegada del alcalde Abel Martínez Durán al ayuntamiento del primer Santiago de América, cuando se inició la transformación de la mas importante plaza de expendio de comestibles en la hidalga de los treinta caballeros.
Para lograr este cambio, el gobernante municipal colocó al frente de la administración del mercado al sr. Alex Pérez, un hombre de trato decente, conocimientos de sus funciones y de firme decisión. Iniciando sus labores cuando se originó la pandemia del Covid-19.
Para nadie es un secreto lo difícil que es tratar con los mercaderes de cualquier lugar del mundo, sin embargo, según nos dice Alex Pérez, administrador del Mercado Hospedaje Yaque, para él no ha sido difícil.

Nos comenta este hombre oriundo de Montecristi, la tierra del dromedario durmiente, que fue formado por unos padres que le inculcaron que las cosas se hacían bien, o no se hacían, y que bajo este lineamiento y dirigido por el alcalde Abel Martínez, inició sus operaciones al frente del mercado, decidido a transformarlo para el beneficio de los munícipes, los mercaderes y la vecindad que circunda el referido lugar de expendio de alimentos.
Los logros son palpables. Vendedores, dueños de almacenes, habitantes del entorno y público en general, alaban la limpieza y orden con que se maneja esta importante plaza comercial.

Antes de la presente administración los vegetales eran colocados en el suelo, la basura y toda especie de contaminación, así como un fétido olor a podredumbre reinaba en el lugar. Al día de hoy todo es muy diferente. Según declaran personas que frecuentan el mercado, unos a traer mercancías y otros a comprarlas.

Nos informa el sr. Alex Pérez, que a partir de esta fecha, los parqueos de vehículos propiedad de dueños de puntos comerciales serán regulados para facilitar el acceso a las vías internas del mercado, y su mejor tránsito.
Cuestionados los vendedores, explicaron estar de acuerdo con las medidas de la administración ya que, desde la llegada de la presente gestión, sus operaciones comerciales son mas organizadas que en ninguna otra.
En el mercado de Santiago hay limpieza, seguridad y se vive en orden.