EL MUNDO
Te contamos sobre los beepers que explotaron y provocaron mas de una decena de muertos y miles de heridos

Ayer explotaron buscapersonas en el Líbano como parte de un ataque coordinado contra Hezbolá. Murieron al menos 12 personas, y hubo miles de heridos. Los hospitales del área no dan abasto.
A las 3.30 p.m. del martes (hora local) los buscapersonas empezaron a sonar. Los informes del lugar dicen que la gente creía que estaba recibiendo un mensaje de parte de los líderes de Hezbolá. Segundos después de los pitidos, los buscapersonas explotaron, causando lesiones a sus propietarios y gente que estaba alrededor. Según funcionarios sanitarios libaneses, las explosiones lastimaron a 1.850 personas en Beirut, 150 en Bekka y 750 en el sur de Líbano. Una ONG de Siria dijo que allí hubo 14 heridos.
Fatima Abdulla, una niña de nueve años, se cuenta entre los muertos junto a otros dos niños. Según el New York Times, vio que sonaba el buscapersonas y lo tomó para mostrarle a su padre. Lo tenía en la mano cuando explotó. Las explosiones también hirieron a Mojtaba Amini, embajador de Irán en el Líbano, que perdió un ojo en la explosión.
Israel no confirmó ni negó su participación en el ataque, aunque el mundo supone que la responsabilidad es de Jerusalén. Hezbolá y el liderazgo civil de Líbano culpan a Israel, y prometen represalias. EE.UU. dijo que no tuvo participación ni conocimiento del ataque.
¿Qué es un buscapersonas? ¿De dónde provenían?
Un buscapersonas es pequeño y simple, una cajita de plástico con pantalla LCD y parlante. La mayoría solo recibe mensajes en forma de línea numérica. Eran populares en las décadas de 1980 y 1990, y causaron pánico moral en EE.UU. porque se relacionaban con el tráfico de drogas.
Con el uso extendido de los teléfonos celulares el buscapersonas fue muriendo, como sucede con toda tecnología ya antigua. Pero había todavía casos en que se utilizaban porque los buscapersonas transmiten y reciben señales vía frecuencias de radio, y funcionan aunque los teléfonos celulares o el Wi-Fi no funcionen. Tampoco tienen GPS, cámaras, ni tecnología que genere datos telemétricos.
Por eso se los considera más robustos y seguros que los dispositivos tradicionales. Los buscapersonas son comunes en hospitales estadounidenses donde los médicos y enfermeros los utilizan para comunicarse a diario.
No pasa nada si caen al suelo, o en el agua del baño. Usan baterías AA, y consumen poco. Son baratos. Son como las cucarachas de la comunicación”, le dijo un médico a NPR en 2023. “El servicio es mejor porque las redes inalámbricas son distintas a las de los teléfonos celulares. Son más confiables en una emergencia”.
Se trataba de buscapersonas Gold Apollo Rugged Pager AR-924, cuya batería puede durar 85 días y la pantalla LED puede leerse bajo la luz directa del sol. El sitio web de Gold Apollo, Taiwan, no está disponible, aunque Gizmodo intentó ponerse en contacto al igual que los periodistas del mundo entero