EL MUNDO
El Departamento del Tesoro estadounidense sancionó este lunes a la red Los Chapitos
EL CORREO. El Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó este lunes a la red criminal Los Chapitos, facción del cártel de Sinaloa, por su papel clave en la producción y tráfico ilegal de fentanilo hacia territorio estadounidense. La Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) también sancionó a dos de sus líderes, Archivaldo Iván Guzmán Salazar y Jesús Alfredo Guzmán Salazar, ambos hijos de Joaquín "El Chapo" Guzmán, quienes permanecen fugitivos.
Las autoridades estadounidenses ofrecieron hasta 10 millones de dólares por información que lleve al arresto o condena de cada uno de ellos, a través del Programa de Recompensas por Narcóticos.
Según el comunicado oficial, laboratorios controlados por Los Chapitos introdujeron fentanilo en pastillas falsificadas fabricadas por el cártel de Sinaloa y traficadas a Estados Unidos. Además, se les vincula con el asesinato del exmarine estadounidense Nicholas Quets, ocurrido el 18 de octubre de 2024 en Sonora, México, en un ataque perpetrado por hombres armados del mismo cártel.
La red sancionada opera también desde Mazatlán, Sinaloa, y estaría implicada en delitos como narcotráfico, lavado de dinero, secuestro y extorsión. Esta acción fue coordinada con la Administración para el Control de Drogas (DEA) y representa la novena medida del segundo mandato del presidente Donald Trump contra los cárteles en la región.
El secretario del Tesoro, Scott Bessent, afirmó que Los Chapitos son “una facción poderosa e hiperviolenta del cártel de Sinaloa” y que estas sanciones responden al mandato presidencial de eliminar a los grupos del narcotráfico.
Como resultado de las sanciones, todos los activos en EE. UU. vinculados a los individuos y entidades señaladas quedan bloqueados y deberán ser reportados a la OFAC. La portavoz del Departamento de Estado, Tammy Bruce, aseguró que estas acciones buscan frenar las finanzas del crimen organizado: “Seguiremos protegiendo a nuestra nación interrumpiendo las fuentes de ingresos que financian la violencia de los cárteles”.
