EL DINERO
Crisis energética en República Dominicana: apagones y retos de generación.
ELCORREORD-*——El sistema eléctrico de República Dominicana atraviesa una grave crisis, con frecuentes apagones que afectan tanto a los sectores residenciales como comerciales, especialmente en áreas donde los usuarios cumplen con el pago de sus facturas. Las autoridades eléctricas atribuyen parte de la situación a la indisponibilidad de plantas de generación; sin embargo, se cree que la verdadera causa radica en la implementación de cortes programados en zonas con elevados niveles de hurto de energía, según el anuncio de Celso Marranzini, presidente del Consejo Unificado de las Empresas Distribuidoras de Electricidad (CUED). Estos cortes han afectado incluso a usuarios con pagos anticipados, creando desconfianza en el modelo de servicio prepago.
Indisponibilidad de plantas: un obstáculo para el suministro
La revisión del Organismo Coordinador de Energía revela que 34 de las 84 plantas generadoras están totalmente fuera de servicio, mientras que otras 30 operan parcialmente, lo que limita significativamente la capacidad de generación de energía en el país. De las plantas más importantes, AES Andrés FO y varias unidades de CESPM están fuera de servicio, mientras que otras, como AES Andrés GN, operan con solo 300 megavatios (MW) de capacidad, muy por debajo de su máximo potencial.
A pesar de estas dificultades, las plantas de energía renovable también están presentando graves problemas. Plantas solares como El Soco, y varios parques fotovoltaicos, se encuentran completamente fuera de servicio, lo que limita la generación de energía limpia. Los parques eólicos, como Larimar y Los Guzmancitos, también han visto reducciones en su capacidad de producción, con 42.29 MW y 23.07 MW respectivamente.
La excepción: Punta Catalina
Una de las pocas buenas noticias en este panorama es la Central Termoelétrica Punta Catalina, cuyas unidades 1 y 2 están generando de manera plena con 340 MW y 370.19 MW, respectivamente. Estas plantas, que operan a carbón, siguen siendo un pilar importante en la estabilidad del suministro eléctrico nacional, mientras otras plantas, como Barahona Carbón, funcionan solo parcialmente.
Impacto en la ciudadanía
El desajuste entre la disponibilidad de energía y la demanda ha generado descontento entre la ciudadanía, especialmente en sectores donde el pago es puntual y el servicio no se cumple. Comunidades como Altos de Ahorro Hondo y la avenida Monumental han visto cómo los apagones se repiten, afectando a usuarios que históricamente gozaban de un servicio estable. Además, sectores como Padre Segura y Villa Mella reportan cortes continuos, que van desde la interrupción diaria hasta largas horas de apagones, creando un escenario de inestabilidad que afecta tanto la calidad de vida como la productividad.
En resumen, la indisponibilidad de plantas y los cortes programados por la alta incidencia de robos de energía están desbordando la capacidad del sistema eléctrico nacional. Esto ha provocado no solo desconfianza en el servicio, sino también un malestar generalizado entre los usuarios que cumplen con el pago de su electricidad. La falta de transparencia en las decisiones y el impacto de las medidas adoptadas por las autoridades reflejan la urgencia de una solución integral para resolver la crisis energética en el país.