LA DUDA ES ENEMIGA DE LA IMAGINACION.
Por el Pastor Rick Warrem
“Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará; no los reprenderá por pedirla. Cuando se la pidan, asegúrense de que su fe sea solamente en Dios, y no duden, porque una persona que duda tiene la lealtad dividida y es tan inestable como una ola del mar que el viento arrastra y empuja de un lado a otro. Esas personas no deberían esperar nada del Señor”. Santiago 1:5-7 (NTV)
La duda es enemiga de la imaginación.
Cuando eras niño, tenías una gran imaginación. Pero cuanto más mayor te haces, más se oxida tu imaginación. Dejas de imaginar cómo podrían ser las cosas y simplemente comienzas a vivir como son. Te quedas estancado en el estatus quo.
La duda y el temor neutralizan lo que Dios quiere hacer en tu vida. Se necesita valor para imaginar. ¿Sabes por qué la mayoría de las personas no imaginan? Porque tienen temor al fracaso.
El valor es hacer lo que más temes. Si no tienes temor, no necesitas valentía. La valentía es cuando estás lleno de temor y dices: “Lo voy a hacer de todos modos”.
Cada gran cosa que hemos hecho en la Iglesia Saddleback, me daba mucho temor hacerla. Pero simplemente dije: “Lo vamos a hacer de todos modos”. ¿Por qué? Porque no voy a dejar que el temor domine mi vida. Así que sigo adelante a pesar de mi temblor.
La valentía es cuando haces lo correcto mientras tienes temor. Puede que te preguntes: “¿Debo esperar hasta que todas mis dudas desaparezcan?” Pero necesitas ir en contra de tus temores. Necesitas ignorar toda la inseguridad que estás sintiendo y simplemente seguir adelante.
Santiago 1:5-7 dice: “Si necesitan sabiduría, pídansela a nuestro generoso Dios, y él se la dará; no los reprenderá por pedirla. Cuando se la pidan, asegúrense de que su fe sea solamente en Dios, y no duden, porque una persona que duda tiene la lealtad dividida y es tan inestable como una ola del mar que el viento arrastra y empuja de un lado a otro. Esas personas no deberían esperar nada del Señor” (NTV).
Tu imaginación estará gobernada por el temor o por la fe. Esa es tu elección. Si dejas que el temor gobierne tu imaginación, terminarás asustado, estresado y preocupado todo el tiempo. Cuando permites que el temor controle tu imaginación, vives una vida miserable.
En cambio, decide que no vas a permitir que el temor te domine. Deja que tu fe domine. Confía en Dios. Entonces podrás avanzar con fe y permitir que tu imaginación se llene de todo tipo de posibilidades, porque todas las cosas son posibles con Dios.
Reflexiona sobre esto:
- ¿Qué es eso grandioso que crees que Dios quiere hacer en tu vida, pero has dejado que la duda te detenga?
- ¿Tendrías temor de abrir verdaderamente tu mente y tu vida a todas las posibilidades de Dios? ¿Por qué o por qué no?
- Cuando le pides algo a Dios en oración, ¿por qué Dios quiere que creas con fe que Él te responderá?
¿Qué harás cuando Jesús regrese?
La Biblia dice que solo puedes llegar al cielo confiando en el Hijo de Dios, Jesucristo. No puedes ganarte la entrada al cielo: “Porque por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe. Esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios y no por obras, para que nadie se jacte” Efesios 2:8-9 (NVI).
Si estás listo para entregar tu vida a Jesús, comienza por hacer esta oración:
“Querido Dios, has prometido que, si creo en tu Hijo, Jesucristo, todo lo malo que haya hecho será perdonado, aprenderé el propósito de mi vida y me aceptarás en tu hogar eterno en el cielo un día.
Confieso que he pecado y te pido perdón. Creo que Jesús murió para quitar mis pecados y que tú lo resucitaste. Quiero confiar en Jesús como mi Salvador y seguirlo como Señor desde este día en adelante. Guía mi vida y ayúdame a hacer tu voluntad. En el nombre de Jesús, te lo pido. Amén”.